Comprar vivienda es uno de los sueños más grandes de cualquier persona o familia. Es un antes y un después en la vida de cada uno. Y aunque esto siempre lo hemos tenido claro, no podemos dejar de lado que definitivamente es la alternativa de inversión más confiable y segura. Pero teniendo en cuenta el momento que vivimos en el país, considero más que pertinente hacer un análisis de la coyuntura económica para determinar si la inversión inmobiliaria en 2023 es una opción acertada.
En los últimos meses, los colombianos enfrentamos la inflación más alta de los últimos veinte años, tenemos unas altas tasas de interés y, sobre todo, con la incertidumbre que rodea el ambiente, el interrogante se hace presente: ¿Es entonces el momento ideal para adquirir vivienda?
Ahora bien, los retos de la economía y los indicadores críticos son una realidad, pero definitivamente SÍ es buen momento para la inversión en vivienda. Miremos por qué.
No hay mejor manera de blindarse contra la inflación que invirtiendo en un activo refugio, como lo es la propiedad raíz. Recordemos que la rentabilidad total de esta inversión tiene dos componentes: el primero, la valorización del inmueble que en promedio está uno o dos puntos por encima de la inflación, con lo que en las actuales circunstancias estaríamos como mínimo conservando el valor del dinero; y, por otro lado, la renta obtenida por arrendamiento, que en promedio es un 6% anual.
Hoy por hoy, evidenciamos una baja oferta de apartamentos para arrendar, la que es superada ampliamente por la demanda, lo que conlleva a que los incrementos de los cánones de arrendamiento sean superiores al 21%. Lo anterior, se sustenta en gran parte por la necesidad de vivienda de la población, por el alquiler en renta corta, por el alto crecimiento poblacional y de hogares, en los que cada vez viven menos personas por inmueble, traduciéndose en la necesidad de nuevas viviendas.
En cuanto a las altas tasas de interés, tenemos un reto muy grande en nuestro país mientras controlamos la inflación.
Es fundamental llamar la atención de las personas para que solo tomen créditos cuando cuentan con la capacidad de pago, de esta manera quienes compran vivienda nueva sobre planos, seguramente en uno o dos años que les entreguen su propiedad, estaremos en un nivel de tasas de interés razonables, para tener cuotas más moderadas y en el entretanto, se gana la valorización del inmueble con solo estar pagando la cuota inicial.
Por otro lado, quien está comprando una vivienda usada con financiación, puede tener la certeza que, en el mediano
plazo, consiga hacer una negociación de la tasa de interés para obtener una cuota mensual de financiación más cómoda y así, no aplazar la compra de la vivienda a un tiempo posterior con precios más altos.
Así las cosas, siempre será un buen momento para alcanzar el sueño de comprar vivienda o de invertir en propiedad, y después de analizar la coyuntura actual, vemos que la vivienda se convierte en una excelente alternativa que brinda seguridad y confianza para el futuro.
Federico Estrada García
Gerente
Lonja de Propiedad Raíz de Medellín y Antioquia
Fuente: Publicación editorial de Informe Inmobiliario mayo 2023
